lunes, 29 de mayo de 2017

LA TEMIDA SOLEDAD (Con la colaboración de Esaú Alonso)

Él estaba solo
como un verso tierno
desayunando con un borracho,
como una flor de primavera
que no se entrega, ni se huele, o peor aún,
como una luna de madera.
Solo
como un caballo de guerra
paseando entre epitafios y oración
en la boca de un leopardo,
como una pluma en las trincheras.
Él estaba tan solo
como la teta de una madre
que a su recién nacido entierra,
como una vela que arde
en las verdades que no se dicen,
como el llanto de la ceguera.
Solo
como el ojo de un general
mirándose al espejo,
como una lágrima rebelde
saliendo del armario, o más,
como una muñeca en el cementerio.
Solo y paciente
en la virtud de las ilusiones,
porque la valentía tiene los defectos
donde los cobardes sus corbatas.

Esaú Alonso Elizo
* * *

En mi profesión es fácil encontrarte a diario muchas personas con ideas perturbadoras sobre la soledad. Muchas de ellas temen sentirse solas y la soledad la perciben como el elemento clave a evitar en la vida, como si con ello pudiesen escapar de la infelicidad. 
Tantas creencias sobre la soledad que generan un sufrimiento absurdo y completamente  irracional.  Creencias que ahogan a mucha gente que se ha separado, enviudado o que se mantiene en una relación por temor a que no haya otra después y no sepa cómo afrontar esa nueva situación de aislamiento. 
¿Aislamiento o encuentro con uno mismo?
Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...